Dirigir un negocio que involucre ventas de bienes requiere mucha atención a los detalles y la organización. Los registros deben mantenerse con precisión para evaluar cómo le está yendo a la compañía al final de cada año. Los gastos de venta se dividen en secciones trimestrales, y son una forma de enumerar y sumar los totales de los presupuestos y el dinero gastado para financiar la empresa. Estos números son extremadamente importantes, ya que luego se comparan con los números de ventas totales para determinar si la compañía ganó o perdió dinero en ese trimestre.
Enumere todos los gastos de venta que no estén basados en tasas fijas y que puedan cambiar de trimestre a trimestre. La variable más común es la comisión pagada a los empleados, que nunca es constante. Sume la comisión total pagada por cada trimestre para obtener la comisión anual total pagada.
Enumere todos los gastos fijos totales, que pueden incluir el alquiler del edificio de oficinas, las facturas del edificio, como teléfono y electricidad, el costo de la publicidad de los productos vendidos y el costo de fabricación de los productos (si corresponde a la empresa). Estos gastos deben enumerarse trimestre por trimestre y luego sumarse para producir un resumen anual final.
Sume todos los gastos fijos y variables, y sume todos los gastos de ventas del año. Compare este número con las ventas totales para evaluar cómo le fue a su compañía durante todo el año y cómo lo hizo trimestre a trimestre.
