Las fuentes de energía no renovables son cada vez más escasas. Más del 85 por ciento de la energía utilizada en los Estados Unidos proviene de un recurso natural no renovable, o NNR, según el Departamento de Energía de los Estados Unidos. Estos recursos incluyen petróleo, carbón, gas natural y uranio. Las NNR no se pueden reponer en poco tiempo, a diferencia de los recursos de energía renovable como la energía solar, la eólica y los biocombustibles. La gestión eficaz de los recursos no renovables significa conservar y reducir las huellas de carbono.
Petróleo
Rechazar "gas que consume". Tenga en cuenta los días de conducir a la droguería de la esquina desaparecido. La planificación de viajes en automóvil para lograr más con cada salida, el mantenimiento regular del automóvil y la conducción a una velocidad constante ahorra gasolina y reduce la dependencia del aceite. Otra opción es conducir un auto más eficiente en combustible. Además, caminar, andar en bicicleta y compartir el automóvil ayuda a administrar recursos petroleros limitados y no renovables.
Climatizar El combustible para calefacción es una forma popular de calentar hogares en regiones que experimentan inviernos severos. En 2009, el presidente Barack Obama firmó una ley para alentar a los propietarios a instalar ventanas contra tormentas, aislar sus casas y sellar las grietas alrededor de puertas y ventanas. Esto puede reducir los costos de calefacción hasta en un 30 por ciento, según Alliant Energy.
Paquete con prudencia. American Airlines estima que se pueden ahorrar más de 1 millón de galones de combustible para aviones por cada 100 libras de peso extra eliminado. Esto hace un promedio de 7 galones de combustible ahorrado cada día por cada 1 libra. Reducción de equipaje innecesario.
Gas natural
Reducir las necesidades de calefacción. Casi una cuarta parte del uso de gas natural de los estadounidenses es para calentar sus hogares. Para administrar mejor este recurso de energía, mantenga el termostato a 70 grados y apague el calor cuando no sea necesario. El uso de un suéter ligero y el uso de una manta cuando está sentado en el sofá puede reducir el uso de calor.
Aumentar la eficiencia de la estufa. Asegúrese de que las ollas y sartenes sean del mismo tamaño que los quemadores utilizados. Cocinar una comida en una cacerola pequeña en un quemador grande desperdicia energía.
Optimizar la eficiencia del calentador de agua. Aislar el calentador de agua además de reducir la temperatura a 120 grados ahorra gas natural y reduce las facturas de calentamiento de agua, dice Consumers Energy.
Carbón y uranio
Aligerar la iluminación. El carbón suministra aproximadamente la mitad de la energía eléctrica que usan los estadounidenses, según la American Coal Foundation. El cambio de bombillas incandescentes a fuentes de iluminación de bajo consumo, como bombillas fluorescentes compactas, bombillas fluorescentes de cátodo frío y diodos emisores de luz, ayuda a conservar el carbón y otros recursos energéticos no renovables.
Disminuir el consumo de electricidad. Apagar las luces al salir de una habitación y apagar los electrodomésticos y los centros de entretenimiento, especialmente los televisores, cuando no están en uso son estrategias inteligentes de administración de energía.
Mantenerse al tanto. La energía nuclear se considera energéticamente eficiente, pero los subproductos del óxido de uranio son radiactivos y deben encerrarse en contenedores o piscinas de hormigón o revestidos de acero. Se están realizando esfuerzos para recuperar y reciclar parte de la energía del subproducto y encontrar una respuesta adecuada a la necesidad de la contención a largo plazo de los desechos nucleares.
Consejos
-
Tome pequeños pasos cada día para cambiar el comportamiento e integrar la administración de recursos de energía en su estilo de vida.
Una evaluación de energía puede ayudarlo a identificar dónde puede ahorrar u optimizar energía.