El trabajo de un director ejecutivo puede tener el glamour del poder y el liderazgo, pero también exige trabajo y conlleva una tremenda responsabilidad. Hay pocas posiciones de CEO abiertas en un momento dado en las principales empresas, pero aumentará sus probabilidades de conseguir un puesto de CEO si entiende completamente el alcance del trabajo y toma las medidas necesarias para obtener las calificaciones que necesita para tener éxito.
Convertirse en el CEO de su propia empresa
Aunque es más común escuchar sobre los CEOs de grandes corporaciones, las pequeñas empresas también tienen CEOs. No todas las pequeñas empresas optan por otorgar el título de CEO a su gerente o propietario, pero la persona que maneja las principales decisiones de la compañía ocupa una posición equivalente a la de un CEO independientemente del título de trabajo exacto. Además de dirigir las operaciones prácticas, el CEO o propietario de una pequeña empresa toma decisiones estratégicas y asume la responsabilidad del panorama general y la dirección general de la empresa. Para convertirse en CEO de su propia empresa, debe iniciar o comprar un negocio, y luego asumir el rol de administrador principal. Sus responsabilidades incluirán la supervisión de todos los aspectos de la empresa, incluidas las finanzas, los recursos humanos, el marketing y la planificación. Su participación directa en cada una de estas áreas dependerá del tamaño de su empresa, las capacidades de su equipo y su capacidad para delegar.
Convertirse en el CEO de una gran empresa
No existe una fórmula única para convertirse en el CEO de una gran empresa, pero el proceso generalmente incluye la educación superior, como un MBA y una experiencia que comienza con su ascenso desde una posición de menor nivel y menos prestigiosa. Los miembros de la junta en el 79 por ciento de las compañías de Fortune 500 se contrataron internamente para puestos de CEO en lugar de elegir candidatos externos. Los rasgos personales pueden ser al menos tan importantes como la experiencia laboral específica para aumentar sus posibilidades de convertirse en CEO. Lo más importante es que la diligencia y la perseverancia son indispensables para desarrollar las habilidades, el conocimiento y la reputación que necesitará. Bill Gates pasó más de 10,000 horas desde la edad de 13 años trabajando en programación antes de convertirse en el CEO de Microsoft, la compañía que fundó. Las habilidades de comunicación también son vitales para un CEO, que debe comunicar la visión de la empresa de manera clara y efectiva.
Perder el trabajo de CEO
Si es el CEO de su propia empresa, es poco probable que pierda su trabajo. Usted es el único responsable de hacer que su negocio tenga éxito, o no. Si lo contratan como CEO de una corporación, su mandato depende de su capacidad para trabajar con éxito con la junta y mantener a la compañía en una buena posición financiera. Puede perder un empleo como director ejecutivo actuando de manera escandalosa que comprometa la reputación de su empresa o tomando decisiones financieras erróneas. También puede perder su posición si es propenso a la microgestión y no permite que su personal haga su trabajo. Una relación adversa con su junta directiva también puede ser motivo de despido. Es mucho más fácil perder un trabajo como CEO que conseguir uno.