La lluvia de ideas ha sido durante mucho tiempo considerada como una de las mejores maneras de encontrar nuevas ideas. Durante una sesión de lluvia de ideas, los miembros de un grupo escriben o gritan todos los conceptos que vienen a la mente, con el objetivo general de encontrar una o dos ideas geniales a partir del ruido. La lluvia de ideas ciertamente tiene su lugar en el negocio, pero puede encontrar algunos inconvenientes al usar esta técnica.
Propiedad
El trabajo en equipo es un aspecto crítico de la gestión de una empresa, pero también debe poder resaltar las contribuciones y los logros individuales. Cuando la mayoría de las ideas de su empresa provienen de sesiones de intercambio de ideas, a los empleados les resulta más difícil apropiarse de las grandes ideas. Esto también hace que sea más difícil para usted identificar a los miembros de su empresa que aportan constantemente grandes ideas a la mesa.
Pertinencia
La idea detrás de la lluvia de ideas es que el juicio se suspende y no hay malas ideas. Esto alienta a las personas a hablar sobre lo que venga a la mente y profundiza su conjunto de ideas. Sin embargo, esto puede ser una espada de doble filo. Con el juicio suspendido, su grupo podría descender rápidamente por un camino lleno de ideas irrelevantes o poco realistas. Si esto dura demasiado tiempo, las sesiones de lluvia de ideas pueden convertirse en una pérdida de tiempo importante en lugar de contribuciones empresariales.
Creatividad
La lluvia de ideas es una especie de creatividad forzada: emitir lo primero que se te ocurra y tratar de seguir adelante. Sin embargo, las sesiones de intercambio de ideas no inspiran inherentemente el comportamiento creativo o innovador de su personal y, a menudo, pueden terminar llenos de repetición de cosas que se han planteado en reuniones anteriores. Es importante encontrar otras formas de inspirar creatividad en su personal si desea mantener a su empresa al límite.
Suposiciones
Las empresas modernas han invertido mucho en la idea de que un grupo de personas puede unirse e intercambiar ideas durante un tiempo para crear la próxima gran innovación. Si bien esto es a veces cierto, la lluvia de ideas es a menudo una colección de ideas inútiles con uno o dos ganadores. Puede mejorar los resultados de la lluvia de ideas pidiendo a los miembros del equipo que se preparen para la actividad investigando los mercados y la competencia. Esto producirá resultados de intercambio de ideas más efectivos, relevantes e interesantes.