Las impresoras térmicas crean imágenes utilizando un cabezal de impresión térmico y un pigmento sensible al calor. Estas impresoras emplean dos tecnologías diferentes, térmica directa y transferencia térmica. Son duraderos, silenciosos y fáciles de configurar y usar y, por lo tanto, populares en muchos entornos empresariales. Algunas máquinas de FAX utilizan tecnología de impresión térmica.
El proceso de transferencia térmica y térmica directa
Las impresoras térmicas que utilizan el proceso térmico directo dependen del papel sensible al calor impregnado con pigmento que cambia de color cuando se expone al cabezal de impresión calentado. Las impresoras que utilizan el proceso de transferencia térmica sostienen una cinta o un cartucho con pigmento sensible al calor, que el cabezal de impresión calentado transfiere al papel durante el proceso de impresión. La transferencia térmica es más común en impresoras térmicas a color.
Desventajas de la impresora térmica
El papel de la impresora térmica sensible al calor tiene un aspecto ceroso y debe protegerse del calor y la luz después del uso, o la imagen impresa puede cambiar. Algunos papeles térmicos están recubiertos con el químico bisfenol A. El BPA puede causar trastornos neurológicos y hormonales, y puede ser absorbido a través del tacto. Si una impresora térmica que utiliza una cinta o un cartucho se calienta demasiado, puede fluir demasiada tinta, creando imágenes con manchas. El sobrecalentamiento puede dañar el cabezal de impresión térmico, y las impresoras térmicas pueden ser costosas de reparar.