A medida que las empresas continúan evolucionando en la era de la información, aumentan las demandas y necesidades de los equipos de tecnología de la información (TI). Desafortunadamente, los presupuestos y el capital no están creciendo de manera correspondiente, por lo que la administración y los ejecutivos deben ser altamente selectivos en su búsqueda de programas que requieren soporte de TI. El establecimiento de objetivos para el departamento de TI se convierte en un desafío cuando las empresas intentan equilibrar las operaciones en curso, las iniciativas estratégicas, el trabajo de garantía y el mantenimiento. Desarrolle objetivos que permitan al equipo mantener las operaciones existentes mientras se posiciona para una mayor expansión.
Establecer objetivos para sostener las operaciones existentes. Realice una evaluación de salud anual de su departamento de TI. Antes de que el equipo pueda satisfacer las necesidades y los deseos de los demás, debe comprender sus propias fortalezas y debilidades para garantizar que se cuenta con la preparación y el financiamiento adecuados para los compromisos existentes. Por ejemplo, revise sus estadísticas de rendimiento relacionadas con el tiempo de actividad del sistema (disponibilidad) o la precisión de los datos (confiabilidad); Si estas áreas no son satisfactorias, establezca objetivos para actualizar o complementar sus sistemas para mejorar estas áreas.
Crear objetivos para la visión estratégica. Participe en el Balance Scorecard, un conjunto de actividades que ayudan a los ejecutivos y líderes de organizaciones a comprender y relacionar la misión y la visión de la empresa con sus objetivos estratégicos. Esto se logra a través de un proceso de nueve pasos que examina la misión, la visión, los desafíos, los habilitadores y los valores de la organización con la perspectiva del cliente, los propietarios de los procesos de negocios y los equipos de infraestructura de apoyo, según lo señalado por el Balanced Scorecard Institute. El conocimiento de primera mano de los planes estratégicos de la organización y las visiones del equipo ejecutivo ayudarán a los líderes de TI a planificar adecuadamente el cambio y la expansión futuros. Si la compañía planea expandirse globalmente, es posible que se deba incluir en la planificación futura una revisión de la potencial expansión de la infraestructura y las alianzas con proveedores en el extranjero.
Desarrollar objetivos para integrar los canales críticos generadores de ingresos. La gestión de la cadena de suministro, la gestión de la relación con el cliente, la inteligencia empresarial y los entornos de colaboración integrados son las competencias básicas que todas las empresas necesitan para promover la eficiencia, mantener la competitividad, gestionar el flujo de trabajo, retener y utilizar el conocimiento de manera efectiva y explotar los sistemas de redes sociales. Si estas áreas residen en sistemas dispares, establezca objetivos para integrarlos para mejorar la accesibilidad de los datos y una mayor inteligencia empresarial (conocimiento sobre su negocio, clientes y proveedores).
Definir objetivos que equilibren los recursos. Si bien la subcontratación a terceros puede ser rentable para ciertos tipos de servicio de recursos, considere otras opciones. El auto-aprovisionamiento (educar a los usuarios finales para que realicen un mayor desarrollo) e insourcing (usar especialistas de TI) puede proteger los datos y la tecnología sensibles, mejorar la moral de los empleados y promover y mantener la continuidad y la cultura de la organización.
Diseñar objetivos que mantengan el foco en la continuidad y la contingencia. Es fácil consumirse con la expansión y la integración, pero recuerde que la disponibilidad del sistema es tan importante como la capacidad. Se pueden perder millones de dólares si la conectividad se corta durante largos períodos de tiempo.
