Requisitos de visualización del cliente para el punto de venta en California

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Anonim

La ley de California dice que los sistemas de ventas electrónicos, como las cajas registradoras basadas en códigos de barras, deben configurarse de manera que el cliente tenga la oportunidad de ver el precio que se cobra por cada artículo antes de realizar el pago. La violación de esta ley puede llevar a una sanción financiera civil.

Sistema de Punto de Venta

Un sistema de punto de venta se define legalmente en California como "cualquier computadora o sistema electrónico utilizado por un establecimiento minorista". El principio es que tales sistemas permiten que el personal de la tienda recupere automáticamente el precio listado de un artículo en lugar de escribirlo manualmente en la etiqueta de precio. Tales sistemas comúnmente involucran códigos de barras y tienen la función adicional de rastrear los niveles de stock en los estantes de las tiendas.

Legislación

El Código de Negocios y Profesiones de California cubre los derechos del consumidor en el momento en que la venta se "altera" en el sistema de punto de venta. Según la ley, el consumidor debe poder ver detalles claros del precio que se cobra por cada artículo, junto con los recargos y descuentos. Por lo general, esto tomará la forma de una pantalla electrónica fácilmente visible para el cliente, mientras que los artículos se levantan. El principio de la ley es dar al cliente una oportunidad justa para detectar cualquier disparidad entre el precio que se muestra en la pantalla y el precio que se sube antes de pagar la transacción.

Penalizaciones

La violación de esta ley es un delito civil y no penal. La multa máxima es de $ 1,000 por cada violación. Los delincuentes deben recibir una notificación por escrito de una multa propuesta y tienen 20 días para solicitar una audiencia sobre el caso. Tal audiencia puede llevar a que la pena se anule, reduzca o aumente.

Derechos del consumidor

Contrariamente a la idea errónea popular, una tienda no está obligada a vender productos al precio que se muestra en las etiquetas de la tienda, ya sea que este precio se haya indicado intencionalmente o por error. Esto se debe a que la ley de contratos significa que las presentaciones de precios no forman una oferta contractual, sino más bien una "invitación a negociar". Es decir, proporcionan información, pero técnicamente el cliente hace la oferta de compra a este precio y la tienda tiene el derecho de rechazar esta oferta.