Un estado de ganancias retenidas indica el patrimonio total de los propietarios en el negocio en un período específico en el tiempo. El patrimonio de los propietarios se calcula simplemente restando los activos totales de la empresa de sus pasivos totales. Esta declaración financiera básica es importante para una variedad de partes interesadas, incluidos los accionistas, la junta directiva, los posibles inversores y los acreedores.
Importancia para los accionistas
El estado de ganancias retenidas es importante para los accionistas porque indica cuánto capital tienen colectivamente en la compañía. Las ganancias retenidas son, esencialmente, la cantidad total de dinero a la que tienen derecho los accionistas, aunque solo pueden recibir el dinero cuando se paga un dividendo a discreción de la junta directiva. Al dividir las ganancias retenidas por la cantidad de acciones en circulación, los accionistas pueden calcular cuánto dinero le da derecho a una acción.
Importancia a bordo
La declaración de ganancias retenidas le dice a la junta directiva cuánto dinero tienen para invertir en la empresa o redistribuir a los accionistas. El consejo de administración es responsable ante los accionistas y, en última instancia, debe tomar una decisión en su interés. Pueden usar el dinero para invertir más en la empresa o pueden convertir las ganancias retenidas en un dividendo que se paga a los accionistas.
Importancia para los inversores
Los inversionistas potenciales analizarán con cuidado las declaraciones de ganancias retenidas de las firmas en las que están considerando invertir. Mirarán no solo la declaración de ganancias retenidas más reciente, sino también las declaraciones a lo largo del tiempo. Esto puede dar a los inversionistas una idea de cuánto dinero pueden esperar razonablemente ganar de sus inversiones.
Importancia para los acreedores
Los acreedores analizarán una variedad de medidas de desempeño, incluidas las ganancias retenidas, antes de otorgar crédito a una empresa. Las altas ganancias retenidas indican que la empresa es rentable y debería tener pocos problemas para pagar sus deudas. Las ganancias retenidas bajas o nulas indican que la empresa puede tener problemas para pagar sus préstamos; por lo tanto, los acreedores pueden optar por no otorgar crédito a estas empresas o pueden cobrar una tasa de interés más alta para compensar el riesgo.