Una buena gestión empresarial no es solo una cuestión de cómo un individuo trata con los factores que puede controlar, sino de cómo responde a las cosas que no puede. Una amplia variedad de factores que incluyen la demanda de los consumidores, la economía en general, el costo de las materias primas, el panorama político y legal y las acciones de las empresas competidoras tienen un impacto directo en los resultados de una empresa.
Económico
La economía en general es uno de los factores ambientales externos más obvios que afectan a las empresas. Ninguna empresa individual tiene un efecto tremendo en la economía en general, pero las empresas siempre deben responder a los cambios económicos. En una economía fuerte, una empresa puede ejercer una gran flexibilidad en términos de precios, gastos y contratación. Cuando la economía está mal, los ingresos bajan y el desempleo es alto. Una empresa debe tener mucho cuidado con el precio de sus productos y servicios y debe actuar con cautela en términos de gastos.
Necesidades del consumidor
Los cambios en las actitudes y la demanda de los consumidores también pueden afectar a las empresas. Por ejemplo, en las últimas décadas ha habido una creciente demanda de productos amigables con el medio ambiente. Las empresas han tenido que responder a esta demanda en términos de qué tipo de productos producen, cómo se empacan esos productos y cómo y dónde los producen. Los cambios en los hábitos de los consumidores, los estilos de vida, los gustos y la moda popular deben tenerse en cuenta en los negocios.
Politico y legal
El entorno externo de una empresa se ve frecuentemente afectado por el clima político y legal. Cosas como la regulación gubernamental, el impuesto a las ventas, los impuestos corporativos y los aranceles de importación pueden tener un impacto en los resultados de una empresa. Además, las regulaciones ambientales y de salud pueden forzar cambios en la forma en que una empresa hace negocios. En algunos casos, ciertos productos o partes de esos productos pueden prohibirse o resultar inseguros, lo que puede obligar a una retirada de productos. En otros casos, las importaciones o exportaciones a un país determinado pueden cortarse debido a la política internacional.
Competencia
Los competidores de una empresa son parte del entorno externo. Ninguna empresa tiene control sobre los productos y servicios ofrecidos por empresas competidoras o sus precios, publicidad, fabricación, contratación o métodos de venta. Las empresas que compiten obviamente se verán afectadas por muchos de los mismos factores ambientales externos, como los cambios políticos, sociales y económicos. Algunos factores ambientales también pueden diferir. Por ejemplo, las empresas con sede en diferentes países, o cuya fabricación tiene lugar en diferentes países, se ven afectadas de diferentes maneras por el entorno político y económico. Al final, el resultado de la competencia con frecuencia se reduce a qué compañía hace el mejor trabajo para adaptarse a su entorno.
