Las donaciones caritativas no siempre ayudan a las personas. Damos con las mejores intenciones, pero el acto de dar inicia una cadena de eventos que pueden causar muchas desventajas. Por ejemplo, Mike Bloomberg, alcalde de la ciudad de Nueva York, prohibió las donaciones de alimentos a refugios para personas sin hogar debido a la preocupación sobre el valor nutricional de los alimentos donados. Problemas similares ocurren con otras donaciones. Algunos en realidad empeoran los problemas y otros simplemente no ayudan.
Socavando las economías locales
Muchos productos donados nunca llegan a los destinatarios previstos, o los destinatarios simplemente no pueden utilizarlos. Por ejemplo, los Estados Unidos enviaron millones de Pop-Tarts a Afganistán. La mayoría terminó vendiéndose en el mercado negro, lo que perjudicó a los comerciantes locales que vendían alimentos. Del mismo modo, las donaciones de camisetas obsoletas del Super Bowl han perjudicado a los fabricantes de textiles que compiten por vender camisas en el mismo mercado. Los productos gratuitos que llegan a un país pobre pueden ayudar a mantenerlos pobres porque a los propietarios de pequeñas empresas les resulta cada vez más difícil venderlos. Los clientes no compran cuando los productos de la competencia son gratuitos.
Perdiendo el objetivo
Conseguir un oso de peluche cuando necesita medicamentos para tratar su tuberculosis puede ser desalentador. El sitio web Foreign Policy (foreignpolicy.com) publicó fotos de osos de peluche y marionetas que se enviaron a Haití cuando lo que se necesitaba era medicina. Algunos lectores objetaron que aún era un gesto dulce, pero la conclusión es que los niños podrían haber usado el valor de esas donaciones para obtener ayuda médica. Se han acumulado camisetas sucias y esteras de yoga en algunas áreas donde las personas necesitan comida y refugio.
Inversiones mal orientadas
Muchas organizaciones de caridad invierten para que puedan ganar más dinero para ayudar a aliviar los problemas. Sin embargo, estas inversiones a veces perpetúan los problemas que las organizaciones benéficas quieren abordar. Por ejemplo, el "Los Angeles Times" informó el 2 de diciembre de 2012 que la Fundación Gates, fundada por Bill y Melinda Gates, invirtió millones de dólares en compañías petroleras. Estas mismas compañías están acusadas de causar los problemas respiratorios en Nigeria que la Fundación Gates está luchando.
Indefensión aprendida
"The Wall Street Journal" informa que la afluencia de donaciones a África ha ayudado a gobiernos ineficaces a permanecer en el poder. Con tanto dinero fluyendo, los países tienen pocos incentivos para crecer, mejorar y convertirse en autosuficientes. Estas grandes cantidades de dinero invitan a la corrupción, y el resultado es que la población no se beneficia porque los burócratas desvían el dinero. La pobreza continúa, y eso genera más ayuda, lo que empodera a los gobiernos corruptos e ineficaces.
