A pesar de que puede estar entre los últimos en escuchar la palabra oficial, realmente no es tan difícil saber cuándo está fallando su empresa. Si su empleador se mantiene firme, busque advertencias comunes y luego tome medidas, como actualizar su currículum, tomar clases para mejorar o aumentar su conjunto de habilidades y establecer contactos con otras personas dentro y fuera de su industria, para protegerse.
Miembros clave del personal comienzan a irse
Según la Asociación Internacional de Profesionales Administrativos, una señal segura de problemas en su empresa es cuando las personas clave comienzan a renunciar. Primero mire al equipo de administración, especialmente a los de recursos humanos, ventas y finanzas, ya que estas personas suelen ser las que tienen más conocimiento de lo que sucede detrás de la escena. Una forma de confirmar sus sospechas es mediante el monitoreo de los perfiles de las redes sociales, como LinkedIn, para el aumento de las actividades de redes de estas personas.
Un cambio repentino en la perspectiva
Un cambio en el enfoque de los resultados a un intenso interés en la eficiencia del proceso es una señal de que su empresa puede estar fallando. En un artículo de la revista "Forbes", Jeff Schmitt, un experto en gestión de mercadeo, dijo que debería estar atento a una serie de nuevas políticas, observaciones en el escritorio y solicitudes para documentar lo que hace en un día laboral normal. Sea especialmente cauteloso si aparece de repente un asesor de eficiencia independiente, ya que esto podría significar que su compañía está tratando de decidir qué miembros del personal incluirán en una primera ronda de despidos.
Silencio silencioso
Una repentina falta de comunicación puede ser especialmente problemática en un negocio que normalmente tiene una política de puertas abiertas y un flujo de comunicación bidireccional. El experto en negocios Don Magruder señala que la evitación es un mecanismo de defensa común entre las personas que no desean mentir o que no están dispuestas a enfrentar la situación. Los gerentes pueden tener miedo de decir demasiado. Independientemente de la razón, la evitación y el silencio repentino de las personas normalmente comunicativas es una señal segura.
Pagos atrasados
Si las cuentas por pagar comienzan a acumularse y su gerente ha implementado un plan de priorización para pagarlas, su compañía está en problemas financieros. Incluso si los pagos no son significativamente atrasados, las llamadas telefónicas repentinas o en aumento de múltiples proveedores y proveedores sobre el estado de las facturas impagadas significan problemas. Peor aún es cuando comienzan a llegar llamadas telefónicas o cartas vencidas de compañías de servicios públicos o del propietario.
Recortes significativos
Busque recortes presupuestarios repentinos y profundos en departamentos individuales, así como recortes en toda la empresa. Por ejemplo, la compañía puede cancelar los programas de capacitación, emitir una moratoria de viaje y suspender una asignación de empleador 401 (k). Su compañía también puede implementar una congelación salarial e interrumpir los beneficios para empleados de larga data, como el café gratis en el comedor.