Al administrar un negocio, la depreciación brinda una imagen más precisa del estado financiero del negocio al enumerar la pérdida de valor de los activos como un gasto. De esa manera, el costo inicial de un artículo se divide a lo largo de su vida útil.
Identificación
Los artículos que se deprecian son activos utilizados durante varios años que tienen un valor de reventa inferior después de cada año de uso. Los ejemplos incluyen vehículos, maquinaria, edificios y muebles. La tierra no se deprecia.
Contabilidad
La depreciación se enumera como un gasto en la contabilidad de una empresa. Hacer esto puede medir las ganancias con mayor precisión, ya que ese elemento ayuda en el negocio durante cada año.
Depreciación anual
La depreciación anual de un activo es una parte de su costo original. La depreciación en línea recta resta el valor de reventa del precio de compra y la divide por el número de años que se espera que se utilice el artículo. Otros métodos de depreciación hacen que el artículo se deprecie más rápidamente en los primeros años y más lentamente después.
Implicaciones fiscales
La depreciación puede ser una deducción del impuesto sobre la renta para los artículos utilizados en los negocios. El Servicio de Impuestos Internos tiene pautas estrictas sobre los artículos elegibles y las condiciones para deducir la depreciación.
Moneda
El otro ámbito en el que se aplica la depreciación es el cambio de moneda, donde una moneda en particular se deprecia cuando pierde valor en comparación con otras monedas.
