Un auditor externo emite un informe de auditoría para proporcionar una opinión acerca de la estabilidad de las finanzas, la posición operativa y el cumplimiento de las leyes y regulaciones de una compañía. La principal diferencia entre un informe no calificado y calificado radica en si el informe muestra posibles problemas con los controles financieros de la empresa. Una organización sin fines de lucro, una entidad gubernamental o una empresa que cotiza en una bolsa de valores utilizaría un informe de auditoría no calificado para mostrar a los socios comerciales que los controles internos son adecuados y funcionales. En contraste, una organización utiliza un informe calificado para mostrar cualquier desviación de los principios de contabilidad estándar que la empresa debe abordar.
Definición de informe no calificado
Un auditor emite un informe de auditoría no calificado para mostrar que los controles internos de la compañía no demuestran ningún problema importante de preocupación. Un auditor generalmente aplica estándares de auditoría generalmente aceptados (GAAP) para garantizar que los controles internos de una empresa sean adecuados, funcionales y estén establecidos de conformidad con las leyes y regulaciones. Un control es un conjunto de instrucciones que el liderazgo superior de una organización establece para evitar pérdidas operativas como resultado de errores, mal funcionamiento tecnológico o fraude.
Beneficios de un informe no calificado
El objetivo final de una empresa es la emisión de un informe de auditoría no calificado, ya que tener un proyecto de ley limpio de salud operativa y financiera indica a los inversionistas y reguladores que los gerentes senior son efectivos. Otros beneficios de una opinión no calificada pueden incluir mejores relaciones con socios comerciales como prestamistas, clientes y proveedores. Por ejemplo, es más probable que una empresa que reciba un informe de auditoría no calificado al final del año sea aprobada para un préstamo.
Definición de Informe de Auditoría Calificado
Cuando una auditoría descubre inquietudes de que la compañía no cumple con los principios de contabilidad generalmente aceptados, él o ella emite un informe de auditoría calificado. Esto suele ser en respuesta a uno de los dos escenarios: una sola desviación de los PCGA o la limitación del alcance. A modo de ilustración, un auditor que revisa los estados financieros de un banco quiere probar las transacciones de la comisión por cobrar. El auditor observa que la compañía registra las comisiones en las transacciones comerciales antes de la fecha de vencimiento, lo que no se ajusta a los GAAP (desviación única). El auditor tampoco puede revisar las cuentas por pagar de la comisión porque los sistemas informáticos de la empresa son disfuncionales (limitación del alcance). El auditor puede emitir una opinión de auditoría calificada y explicar las razones de la calificación.
Efectos de la empresa de los informes calificados
Si bien un informe de auditoría calificado no es tan malo como una opinión adversa, aún podría dañar la capacidad financiera de la empresa. Para ilustrar, una empresa que cotiza en una bolsa de valores puede ver una fuerte disminución en el valor de sus acciones si los inversionistas no entienden el alcance de los problemas internos señalados en un informe calificado. Además, un prestamista o un proveedor puede requerir más garantías financieras de una compañía antes de comprometerse en transacciones futuras.
Cómo difieren estos informes de auditoría
Si bien un informe no calificado muestra que no hay problemas de preocupación, un informe de auditoría calificado indica a la alta gerencia que existen problemas de control interno en los mecanismos de información financiera. Los líderes superiores pueden establecer medidas correctivas y garantizar que los empleados sigan nuevas medidas al realizar sus tareas. Una vez que los problemas se resuelven a satisfacción del auditor, puede emitir una opinión sin reservas al final de la siguiente auditoría.