Un análisis es un tipo de investigación diseñada para producir una visión de lo que es y lo que podría ser. El análisis organizacional examina específicamente el estado actual del marco operativo y estructural de una empresa y los indicadores de productividad, como las tasas de producción. Existen cuatro áreas clave de análisis organizacional, cada una con sus propios objetivos.
Productividad
El objetivo del análisis de productividad es analizar la eficiencia y la producción al correlacionar directamente el resultado de un producto o servicio con la operación comercial general. Este tipo de análisis determina todo lo involucrado en la producción. Una versión de esto es el análisis histórico, que examina la productividad en relación con la operación de un período anterior. El análisis de productividad es más útil para los proveedores de servicios u organizaciones involucradas en la producción de un producto duro.
Eficiencia
El objetivo de un análisis de eficiencia es determinar si una compañía está realizando operaciones de la manera más segura pero más rápida. Los resultados de este análisis pueden dar lugar a que una empresa identifique áreas de exceso, lo que podría eliminar y ahorrar costosos gastos generales. Las organizaciones que realizan un análisis exhaustivo de la eficiencia, o hacen de éste uno de los objetivos de un estudio general, generalmente encuentran formas de mejorar la velocidad, la gestión del tiempo y la gestión de la carga de trabajo.
Team Building
Todas las organizaciones requieren trabajo en equipo. El análisis de la creación de equipos, que va más allá de los problemas interpersonales, revela cómo se distribuyen y completan las tareas y los proyectos. Este tipo de análisis también produce líderes clave en la organización. Queda claro quiénes son los destacados: aquellos que pueden ser valiosos para las organizaciones que buscan crecer.
Comunicaciones
Un objetivo clave para un análisis organizativo exhaustivo es el de las comunicaciones. Los elementos de las comunicaciones de la organización incluyen sistemas de correo electrónico, telecomunicaciones, sistemas entre oficinas y cualquier sistema adicional relacionado con la productividad. Un análisis con comunicación efectiva como objetivo destacará aquellos sistemas que son exitosos, definiéndose "exitoso" como una contribución a la eficiencia general, la productividad y los esfuerzos de formación de equipos de la organización.