La reestructuración corporativa es un término general que se usa para describir cambios importantes dentro de una empresa. Estos cambios generalmente afectan las prácticas comerciales básicas, y vuelven a determinar quién toma las decisiones importantes en una empresa o cómo se abordan ciertas partes de su plan de negocios. El tipo de reestructuración depende de los elementos del negocio afectado y de las razones por las que se está produciendo la reestructuración.
Reestructuración interna
La reestructuración corporativa se produce en función de las necesidades de la empresa. La reestructuración interna suele ocurrir como resultado de un análisis comercial que muestra la necesidad de una mayor eficiencia en la forma en que los departamentos comerciales se comunican y completan las tareas. A veces, un segmento particular de la empresa comenzará a fallar, y la compañía necesitará reasignar recursos para darle soporte. A veces, una empresa puede haberse expandido mucho y necesita volver a concentrarse en sus capacidades básicas. En otras ocasiones, una empresa puede necesitar reestructurar su posición financiera para continuar obteniendo ganancias. A menudo, los planes de reestructuración son necesarios simplemente para satisfacer las demandas constantemente cambiantes de la tecnología que los competidores están adoptando. No todas las razones para la reestructuración son negativas, y muchos benefician tanto a los empleados como a los ejecutivos de la empresa.
Reestructuración financiera
La reestructuración financiera se ocupa de todos los cambios que las empresas realizan en sus deudas y capital, incluidas las fusiones, adquisiciones, empresas conjuntas y otros acuerdos. Generalmente, estos ocurren cuando una compañía se une o es comprada por otra compañía. Las posesiones de la compañía, o al menos algún interés en la compañía, se transfieren a otra organización o grupo de inversionistas. Las prácticas comerciales reales pueden permanecer sin cambios.
Reestructuración Tecnológica
La reestructuración tecnológica ocurre cuando se ha desarrollado una nueva tecnología que cambia la forma en que opera una industria. Este tipo de reestructuración generalmente afecta a los empleados y tiende a generar nuevas iniciativas de capacitación, junto con algunos despidos a medida que la empresa mejora la eficiencia. Este tipo de reestructuración también implica alianzas con terceros que tienen conocimientos o recursos técnicos.
Métodos de reestructuración
Los métodos de reestructuración normalmente se dividen en expansión, reenfoque, control corporativo y estructura de propiedad. Los dos últimos, el control corporativo y la estructura de propiedad, se aplican principalmente a los cambios financieros y afectan la propiedad. El control corporativo, por ejemplo, es un método en el que la empresa vuelve a comprar suficientes acciones para poder tomar sus propias decisiones nuevamente. La expansión se produce con la adquisición, fusiones o empresas conjuntas. El reenfoque puede tomar muchas formas, incluyendo divisiones de negocios, liquidaciones de ciertas empresas y prácticas generales de consolidación.