El presupuesto basado en el rendimiento es un término amplio para un tipo de presupuesto utilizado casi exclusivamente por organizaciones públicas, como las ramas de gobierno y los programas que crean los gobiernos. El objetivo es crear un sistema de presupuesto flexible en un área donde las finanzas, los fondos y las agendas políticas están cambiando constantemente. Como resultado, la presupuestación basada en el rendimiento (PBB) se centra en objetivos más que en límites y facilita que los planes acepten cambios repentinos. Esto conlleva algunas desventajas.
Límite vs objetivo
PBB trabaja con objetivos y metas. Puede establecer una meta para poner computadoras en 100 escuelas, por ejemplo, en lugar de establecer un límite sobre cuánto dinero se puede gastar en computadoras. Si bien esto tiene sus ventajas, también crea dificultades. Por ejemplo, ¿cuánto dinero debería gastarse en computadoras? ¿Qué tipos de computadoras son las más adecuadas para las escuelas en cuestión? Un presupuesto con límites ayuda a responder estas preguntas. Un presupuesto con solo objetivos puede ser demasiado nebuloso, lo que lleva a pronósticos imprecisos y gastos excesivos.
Problemas de medición
Otro problema con el sistema objetivo que usa PBB es la medición. Incluso si se puede desarrollar un presupuesto coherente y el proyecto se lleva a cabo hasta su finalización, la definición de la finalización puede plantear problemas. Algunos objetivos pueden ser vagos, por ejemplo, mejorar la tecnología en un distrito escolar. Una organización puede tener puntos de vista contradictorios sobre cuándo se ha alcanzado ese objetivo, lo que dificulta encontrar un final para el proyecto y un punto de inflexión para el presupuesto.
Análisis de costos
Debido a que PBB es tan vago, no presenta un marco de costos claro para que lo sigan las organizaciones. En otras palabras, PBB puede crear una gran cantidad de trabajo adicional para los analistas. Deben centrarse en un objetivo, pero también realizar análisis de costos separados para establecer precios individuales en los pasos involucrados. Este análisis de costo adicional es un drenaje de fondos y agrega confusión al presupuesto.
Problemas de flexibilidad
La flexibilidad es una de las principales ventajas de PBB. Pero también abre la puerta a cambios amplios que pueden hacer obsoletos los análisis de costos y presupuestos anteriores. PBB coloca una gran cantidad de poder estratégico en manos de líderes y programas públicos, pero estos tienen la costumbre de cambiar. Se puede nombrar un nuevo director y cambiar el objetivo a 500 computadoras en las escuelas, lo que requiere una revisión completa del presupuesto.