Las diferentes cuestiones económicas tienen en cuenta el aumento y la disminución del poder de compra de un dólar. Estas razones pueden incluir un aumento o una caída en el Índice de Precios al Consumidor o el IPC, la inflación, el crecimiento económico o la recesión económica. El efecto de los cambios en el poder de compra tiene un impacto en los consumidores, en la economía nacional, así como en los tipos de cambio.
Inflación
A medida que aumenta la inflación, el valor del dólar estadounidense cae porque los precios generales de los bienes y servicios están aumentando. Los precios más altos conducen a una disminución en el poder de compra de un dólar. Como resultado, los consumidores a menudo ajustan su comportamiento de compra y gastan menos de su ingreso disponible. Este efecto de la disminución del poder adquisitivo puede llevar a una disminución en el gasto general de los consumidores en todo el país. La disminución del gasto del consumidor es a menudo un indicador de crecimiento económico lento o recesión económica.
Efecto ingreso positivo y negativo
Cuando el precio de los bienes y servicios aumenta, el ingreso ajustado a la inflación del consumidor disminuye. El ingreso ajustado a la inflación es lo que los economistas denominan ingreso real. Este es un efecto negativo de la disminución del poder de compra, porque los consumidores tienen que gastar más dinero en los bienes o servicios después del aumento de precio que lo que tenían que gastar antes del aumento. Cuando el precio de los bienes y servicios disminuye, aumenta el ingreso real. Los consumidores ahora gastan menos en un bien o servicio después de la disminución del precio, lo que les otorga más poder de compra.
Sustitución de bienes y servicios
Cuando los precios de los bienes y servicios aumentan, los consumidores tienen menos poder de compra. En este caso, los consumidores pueden sustituir una opción más barata en lugar de la opción más cara. La demanda por el bien o servicio más caro disminuye y la demanda por la opción más barata aumenta. Los economistas se refieren a esto como el efecto de sustitución. Cuando el precio de bienes y servicios similares sigue siendo el mismo, los consumidores a menudo cambian entre productos. Dado que no hay diferencia en el precio, el poder de compra es el mismo y generalmente no se toma en cuenta en la elección del consumidor entre los dos.
