A partir de la Ley de Derechos Civiles de 1964, las leyes federales de Igualdad de Oportunidades en el Empleo (EEO, por sus siglas en inglés) han promovido constantemente los principios de imparcialidad e igualdad de oportunidades para todos en el lugar de trabajo. Más específicamente, las leyes prohíben la discriminación relacionada con el trabajo basada en una amplia gama de características personales como raza, edad, género, religión y ciertas condiciones de salud.
Prohibiendo la Discriminación Intencional
Algunas formas de discriminación representan intentos deliberados de violar los principios de igualdad de oportunidades. Por ejemplo, un empleador siempre puede pagar a los hombres más que a las mujeres, mientras que otro puede negarse a entrevistar a los solicitantes de empleo discapacitados. Un propósito clave de las leyes de EEO es prevenir tales conductas intencionales. En este caso, el empleador anterior infringiría la Ley de igualdad de remuneración, mientras que el último violaría la Ley de Estadounidenses con Discapacidades..
Prohibiendo la Discriminación No Intencional
Un empleador puede tomar acciones que no están motivadas por un sesgo, pero que aún tienen un efecto perjudicial en ciertos trabajadores. Las leyes de igualdad de oportunidades también se aplican a estas formas no intencionales de discriminación. Por ejemplo, las leyes exigen que los empleadores realicen ajustes razonables para que los empleados practiquen sus religiones mientras se encuentran en el lugar de trabajo. Un código de vestimenta que prohíba todas las coberturas de la cabeza o que requiera trabajo en un día santo probablemente violaría este principio.
Cobertura amplia
Otro principio clave de EEO es que la protección contra la discriminación debe extenderse a tantos lugares de trabajo como sea posible, tanto en el sector público como en el privado. Cuatro de las leyes se aplican a todas las empresas privadas, gobiernos estatales y locales e instituciones educativas con al menos 15 empleados: la Ley de Derechos Civiles, la Ley de Igualdad Salarial, la Ley de Estadounidenses con Discapacidades y la Ley de No Discriminación de Información Genética. La Ley de Discriminación por Edad en el Empleo cubre una gama de otros empleadores, incluidas las empresas privadas con al menos 20 empleados.
Fuerte aplicación
Las leyes de EEO se aplican a nivel federal por la Comisión de Igualdad de Oportunidades en el Empleo y en los niveles estatales y locales por las Agencias de Prácticas Justas de Empleo designadas. Cualquier trabajador que crea que ha sufrido discriminación tiene derecho a presentar una queja ante uno o más de estos organismos. Si se juzga que su queja tiene mérito, la EEOC tiene amplios poderes para iniciar una investigación o emprender acciones judiciales a menos que la disputa se resuelva satisfactoriamente.