Cuando se ejecuta un negocio, los problemas son prácticamente inevitables. Es cómo usted enfrenta estos problemas que puede ser la diferencia entre el fracaso y el éxito. Debe tener planes de contingencia establecidos para estar preparado cuando surjan problemas. También debe ser capaz de gestionar una crisis una vez que se produce.
Propósito: Planificación de contingencia
Un plan de contingencia también se conoce como un plan de respaldo. Es una estrategia preparada que puede implementar inmediatamente después de un cambio en la condición de su empresa. El plan está diseñado para permitir que su empresa resista circunstancias desfavorables. Deben existir planes de contingencia para todo, desde recesiones financieras hasta desastres naturales. Tener este plan en funcionamiento mantendrá su negocio operativo, si no es rentable, durante circunstancias que podrían afectarlo negativamente.
Propósito: Manejo de crisis
Idealmente, su estrategia de gestión de crisis debería ser la implementación de su plan de contingencia. Este no es siempre el caso. Simplemente no puede anticipar cada desastre que pueda ocurrir en su compañía. Cuando se produce una circunstancia imprevista que puede poner a su empresa en una mala posición, debe analizar y reaccionar ante la situación. Su acción debe ser rápida y decisiva para evitar empeorar una mala situación.
Cómo implementar: Planes de contingencia
Los mejores planes de contingencia son los que nunca tiene que usar. La gerencia debe reunirse y discutir tanto los objetivos como las estrategias para alcanzarlos. Una vez que la administración designa una estrategia principal, debe crear dos o tres rutas alternativas en caso de que la principal no funcione. Por ejemplo, digamos que un banco comercial quiere expandir su negocio apuntando a negocios fuera del estado. La estrategia termina costando más de lo que está aportando. Un plan de contingencia es concentrarse en los negocios locales y expandirse hacia afuera a través de la boca a boca.
Cómo implementar: Gestión de crisis
Un plan de contingencia no siempre es adecuado para una crisis. No cumplir con los objetivos de ventas es un problema. La construcción de su techo colapsando es una crisis. Perder la mitad de su negocio a un competidor es una crisis. La clave para la gestión de crisis es mantener una cabeza nivelada. Debes analizar la situación rápidamente, pero a fondo. Debe actuar de manera oportuna, pero no sin pensar. En última instancia, una crisis puede ser demasiado grande para manejarla, pero si mantiene la calma y actúa adecuadamente, su negocio puede sobrevivir.