La gestión de la exposición es fundamental para las empresas multinacionales o las empresas relacionadas con la exportación o importación de productos. Las técnicas para la gestión de la exposición minimizan los riesgos asociados con las fluctuaciones de la moneda al convertir monedas. Las empresas deben considerar cuidadosamente cada opción disponible cuando se encuentren en una situación que requiera el manejo de la exposición, ya que no existe una mejor técnica para minimizar el riesgo de exposición.
Contratos de Futuro
Un contrato de futuros es útil para proporcionar una exposición limitada al riesgo al permitir que la empresa compre o venda un contrato que represente la moneda y el monto necesario a un tipo de cambio específico. Por ejemplo, si su empresa está comprando productos mediante el uso de euros dentro de 60 días, no hay forma de saber si el euro será más fuerte frente a su moneda local, lo que haría que los productos sean más caros de lo previsto. El contrato a plazo le permite comprar los euros al precio de hoy, pero dentro de 60 días. Una desventaja es que si su moneda local se vuelve más fuerte, no puede aprovechar el tipo de cambio porque ya ha acordado un tipo específico.
Cobertura delantera
Una cobertura a plazo es similar al contrato de futuros, sin embargo, puede negociar la tasa directamente con el banco o la institución financiera. Un contrato de futuros es un contrato estándar que se puede comprar o vender en el mercado cambiario, mientras que una cobertura a plazo es una solución personalizada para su negocio en particular.
Opciones
Una opción le otorga el derecho de cambiar la moneda a una tasa específica, pero no la obligación de hacerlo. Considere una opción como un tipo de póliza de seguro por un período de tiempo específico, donde pagará por la opción de realizar la transacción en caso de que surja la necesidad donde resulte útil.