Como empleador, es importante establecer y aplicar procedimientos disciplinarios para garantizar que su entorno de trabajo funcione sin problemas. En cualquier lugar de trabajo, puede esperar que surjan conflictos y que los empleados rompan las reglas. Sus empleados necesitan entender las consecuencias y el castigo correspondiente por sus acciones. Si está considerando enviar a un empleado a casa como una forma de castigo, deberá comprender sus derechos. En algunos casos, es posible que aún deba pagarle al empleado.
Enviando empleados a casa
Como empleador, usted tiene la autoridad de enviar a los empleados a casa como castigo si violan la política de la empresa. Los empleadores tienen el derecho de promulgar sus propias políticas de disciplina. No hay medidas estándar que deba seguir al crear reglas y consecuencias de la empresa. Si decide enviar a un empleado a su hogar por un día o más, se lo denomina suspensión. Una suspensión puede durar tanto como el empleador lo desee. La suspensión también puede ser indefinida.
Estableciendo una política de disciplina
Si bien no existe una política disciplinaria estándar, los empleadores deben establecer reglas disciplinarias y procedimientos de quejas por escrito en virtud de la Ley de Empleo de 2002. Las reglas y responsabilidades deben estar claramente definidas para los empleados. Sus empleados deben leer la política de disciplina y firmar para verificar que entienden y están de acuerdo. Algunas empresas optan por adoptar el sistema de disciplina progresiva, que comienza con una advertencia verbal, seguida de una advertencia por escrito. Si el comportamiento insatisfactorio continúa, los empleados pueden ser suspendidos sin goce de sueldo. Cuando la disciplina no funciona, los empleadores a menudo no tienen más remedio que terminar el empleo.
Empleados exentos y no exentos
Los empleados están clasificados como exentos o no exentos. Los empleados no exentos generalmente tienen deberes establecidos y pueden recibir horas extras. Los empleados exentos son a menudo trabajadores de cuello blanco con un salario. Si un empleado no está exento, debe pagar al empleado solo las horas trabajadas. Por lo tanto, enviar a un empleado a casa sin paga puede ser un método de castigo exitoso. Por otro lado, los empleados exentos tienen derecho a la paga de todo el día, incluso si solo trabajaron un minuto. Si el empleado se presenta a trabajar y luego lo envían a su casa, se le solicitará que le pague durante todo el día conforme a la Ley de normas laborales justas.
Empleados que terminan
En la mayoría de los estados, el empleo se considera "a voluntad". Esto significa que una relación laboral puede ser terminada en cualquier momento por el empleador o empleado. Los empleadores que despiden a un empleado pueden hacerlo por cualquier razón, siempre que no sea una razón ilegal, como la discriminación. Hay una excepción al empleo a voluntad si se le promete al empleado seguridad laboral a través de un contrato.