Uno de los objetivos para muchas empresas es la expansión internacional, que abre nuevos mercados pero también puede traer nuevos desafíos. Algunas de las cuestiones con las que una empresa debe lidiar cuando se expande en el extranjero son las divisas y los tipos de cambio, ya que, por lo general, el comprador y el vendedor no utilizan una moneda común.
Definición
Una moneda de factura es la moneda que utiliza una empresa para cobrar a sus clientes. Un comprador acepta una moneda de factura cuando firma un acuerdo de compra o hace un pedido. En cualquier caso, la moneda de la factura representa la forma de medir el precio de un pedido. La moneda y el importe de la factura se fijan en el momento en que una empresa emite la factura, ya sea antes, durante o después del envío de productos o la prestación de servicios. Las transacciones nacionales también tienen monedas de factura, pero como el vendedor y el comprador usan una moneda común, a veces se asume la moneda de factura.
Formato
Las facturas internacionales incluyen un elemento de línea denominado código de moneda, que se refiere a la moneda de la factura utilizada en el resto del documento. Por ejemplo, una factura que utiliza dólares canadienses como moneda de facturación incluiría el código de moneda CAD. El resto de la factura usaría números simples o el símbolo de dólar, todos los cuales se referirían a dólares canadienses. Esto incluye todos los montos que figuran en la factura, incluido el precio unitario, el precio total, el monto adeudado y los gastos de envío y seguro.
Significado
Las monedas de la factura son importantes por varias razones. Una empresa o un individuo que realice compras a varios proveedores internacionales deberá utilizar los tipos de cambio para convertir y comparar las facturas anteriores para el mantenimiento de registros e informes fiscales. Además, los valores de las divisas cambian con el tiempo entre sí. Esto significa que la moneda de la factura de un producto puede afectar su precio para el comprador si el tipo de cambio entre la moneda del comprador y la moneda de la factura cambia durante el proceso de venta.
Monedas comunes de facturas
La moneda de factura más común para transacciones internacionales es el dólar estadounidense o el dólar estadounidense. Esto refleja la posición de los Estados Unidos como un exportador importante, así como la estabilidad relativamente estable del dólar. Desde su introducción a principios de la década de 2000, el euro se ha convertido en una moneda de factura común en ciertas partes del mundo. Cualquier moneda puede ser una moneda de factura siempre que el comprador y el vendedor acepten su uso.