Las estructuras salariales tradicionales dentro de las empresas se han centrado tradicionalmente en el trabajo asignado. Los salarios se han basado en la posición y la antigüedad y están influenciados por factores como el salario mínimo y la negociación. Aunque las habilidades y la competencia se han reflejado indirectamente, los sistemas de pago no se han diseñado para alentar el desarrollo de las personas. Con los avances tecnológicos y el enfoque en la productividad y la calidad, muchas empresas ahora reconocen la necesidad de centrarse en las contribuciones individuales.
Pago basado en habilidades
Los sistemas basados en habilidades se han usado durante mucho tiempo para definir trabajos dentro de los oficios. Aumentar los niveles de habilidad es el factor determinante para describir posiciones como aprendiz, oficial y maestro artesano. Otros ejemplos de sistemas de pago basados en habilidades se pueden encontrar entre los trabajos de cuello blanco en los que la compañía está proporcionando una progresión profesional basada en el aumento de habilidades técnicas como una alternativa a la promoción a través de varios niveles de gestión.
Sueldo basado en la competencia
El término pago basado en la competencia describe un sistema en el que las recompensas se basan en el uso de la competencia sin tener en cuenta los resultados. La premisa es que el desempeño individual depende de tener competencias relevantes y los niveles más altos de competencia producirán un desempeño superior. Un sistema de pago por competencias se centra en los individuos. En la práctica, los sistemas basados en competencias rara vez se utilizan en forma pura. La competencia puede ser uno de los factores que determinan el pago, pero el rendimiento también puede ser un factor.
Solicitud
Si bien los sistemas de pago basados en habilidades y competencias se centran en individuos en lugar de empleos, la manera en que se evalúa al individuo para propósitos de pago es diferente. Los sistemas basados en habilidades están mejor definidos, ya que se han utilizado durante años como la base para definir ciertos trabajos. El pago se basa en habilidades verificadas por algún tipo de evaluación o certificación. Estos sistemas de pago se han aplicado tanto a los trabajadores de cuello azul como a los de cuello blanco. En contraste, los sistemas de pago basados en competencias se han aplicado como componentes de un sistema de pago y hasta ahora se han aplicado a individuos a nivel profesional o de gestión.
Tendencias
La tendencia hacia organizaciones más ágiles en las últimas décadas ha contribuido al desarrollo de sistemas de pago que favorecen a los empleados con una amplia base de habilidades y competencias. Algunos de los resultados relacionados con esta tendencia incluyen niveles reducidos de personal y expectativas de mayor desempeño por parte de los individuos.