Los envases metálicos van desde envases de galletas de hojalata y aluminio hasta latas de acero para bebidas. El metal es útil porque es duradero, no cuesta demasiado y no es tóxico, por lo que es muy adecuado para almacenar alimentos. Sin embargo, este tipo de embalaje también tiene algunas desventajas. Los problemas con el embalaje de metal varían según el tipo específico de metal utilizado.
Corrosión
Algunos tipos de embalajes metálicos, como el acero, son vulnerables a los efectos de la corrosión, que pueden hacer que el metal se deteriore. La corrosión tiene lugar cuando el metal comienza a transformarse de nuevo en su estado original; por ejemplo, el acero se convierte de nuevo en el mineral de hierro del que proviene. La corrosión es causada por la oxidación, producida cuando el metal está expuesto al aire y al agua. Un ejemplo de corrosión es el óxido, que se produce en los empaques de acero y hace que se desprenda. Los embalajes metálicos suelen estar recubiertos de otros materiales, como el cromo, para evitar que se produzca la corrosión.
No puedo ver los contenidos
El empaque de metal puede mantener el contenido de un contenedor seguro y fresco, pero presenta una desventaja porque no es transparente, por lo que los consumidores no pueden ver el empaque para verificar el contenido o para inspeccionar una posible compra. Esto limita los usos de los envases de metal dentro del sector minorista, ya que otros materiales de embalaje, como el plástico, son mejores en algunas situaciones. Por ejemplo, el plástico utilizado en un blister usado para almacenar clavos permite a los consumidores verificar el tamaño y el tipo de clavos dentro del empaque, lo que no sería posible con el empaque de metal.
Problemas de almacenamiento
El estaño se usa a menudo para ciertos tipos de recipientes, incluyendo aquellos para galletas. Debido a que el embalaje de metal no se dobla o aplasta fácilmente a mano, los contenedores son difíciles de almacenar de manera efectiva, tanto durante como después del uso. Por otro lado, un contenedor de papel o plástico puede ser más fácil de plegar o aplastar y guardar en un armario u otra instalación de almacenamiento.
Aluminio y Acidez
El aluminio es otra opción común para los envases de metal. Si bien el aluminio es impermeable a la corrosión cuando se usa para almacenar productos alimenticios, tiene un problema con los alimentos ácidos como el ruibarbo y los tomates. Estos alimentos son especialmente ácidos y pueden verse afectados por el aluminio si el metal se utiliza para almacenarlos. El resultado del uso de envases de aluminio para estos alimentos es que los alimentos terminarán probando el aluminio.