La seguridad del cliente es importante para todas las empresas. Los clientes deben tener una experiencia segura mientras realizan una compra o mientras esperan que se complete un servicio. Se pueden implementar muchos tipos de políticas de seguridad para garantizar que los clientes se mantengan seguros durante una transacción comercial.
Colocar carteles
Una cantidad adecuada de carteles alrededor de la tienda o zona de trabajo mostrará los riesgos potenciales mientras compra o espera un servicio. Las señales deben colocarse en áreas que las personas puedan ver fácilmente, como las que se encuentran junto a las puertas. Por ejemplo, las tiendas minoristas que tienen puertas corredizas de entrada y salida de vidrio deben tener letreros que mencionen a los clientes que las puertas son automáticas y que pueden cerrarse si el sensor no detecta movimiento. Los talleres de reparación de servicio deben tener carteles colocados en la sala de espera que indiquen que los clientes no pueden ingresar al garaje de servicio debido a la maquinaria pesada que está siempre en movimiento. Estos son solo dos ejemplos de cómo las señales pueden prevenir accidentes simples.
Reparar daños rápidamente
Una política que siempre debe estar vigente para todas las empresas es reparar los daños lo más rápido posible para que los clientes no sufran lesiones mientras compran o esperan un servicio. Los daños que incluyen fugas de agua, enchufes eléctricos defectuosos, estantes rotos y pisos sueltos son solo algunos ejemplos. Los empleados deben anotar los daños en el lugar de trabajo y notificar a un gerente tan pronto como sea posible. El administrador debe tratar de reparar el daño o llamar a un personal certificado que esté calificado para reparar cualquier daño que pueda necesitar reparación. Si el daño no es reparado, un cliente puede lesionarse y costarle dinero a la empresa por lesiones y juicios.
Notificar y ayudar a los clientes durante una emergencia
Los clientes deben ser los primeros en salir de la tienda o del área de servicio durante una emergencia, como un incendio. Durante una emergencia, todos los empleados deben notificar y ayudar a los clientes a salir de la tienda de manera segura y oportuna. La tienda o el área de servicio deben revisarse en todo momento para asegurarse de que ningún cliente se quede atrás. Las señales alrededor de las puertas deben identificar las salidas de emergencia.
Use herramientas para prevenir accidentes
Naturalmente, los clientes compran en muchas tiendas minoristas o esperan pacientemente en los departamentos de servicio. Los empleados deben usar las herramientas de seguridad proporcionadas por la empresa para proteger indirectamente al cliente de un accidente o reconocer que se ha producido un derrame en un pasillo o en un vestíbulo. Las escaleras nunca deben dejarse abiertas sin vigilancia. Dejar una escalera abierta puede tentar a un comprador o niño a subir la escalera. Las escaleras deben cerrarse cuando no estén en uso y colocarse de manera segura en el estante con correas de goma diseñadas específicamente para sostener las escaleras verticalmente en posición vertical. Los conos de precaución amarillos o anaranjados deben informar a los clientes de un derrame en el piso, con los conos colocados en el centro del derrame hasta que se pueda limpiar. Estas dos políticas mantendrán a los clientes seguros mientras compran o esperan.
Ayudar a los clientes con artículos grandes y pesados
Los clientes pueden lesionarse simplemente levantando un objeto que es grande y / o pesado. Los minoristas que venden artículos pesados y grandes, como muebles o utensilios de cocina, deben tener empleados que ofrezcan asistencia con estos artículos.A veces, se necesitan al menos dos empleados para levantar artículos más voluminosos, como un juego de muebles de exterior de cinco piezas. Haga que los empleados caminen por la tienda ofreciendo asistencia a los clientes antes de que intenten levantar ellos mismos los artículos más pesados. Con un buen trabajo en equipo de los empleados, los clientes pueden ser asistidos sin tener que esforzarse por levantar objetos pesados. Los clientes también deben recibir carritos de compras y carretillas de mano. Por ejemplo, si se ve a un cliente caminando con un juego de utensilios de cocina, un empleado debe ofrecer un carrito de compras para evitar que el cliente tenga que llevar un artículo tan pesado.