En un artículo en "Hotel-Online" de julio de 2000, Mazalan Mifli argumenta que el menú podría considerarse "el alma" del restaurante; les dice a los clientes qué comida y bebida se ofrecen y a qué precio. Analizar los menús ayuda a los dueños de restaurantes a comunicarse con sus clientes y ayuda a los clientes a decidir qué comprar. Los propietarios de restaurantes analizan periódicamente un menú para asegurarse de que están al día con los gustos de sus clientes. Es una habilidad valiosa que puede marcar la diferencia entre mantenerse como un establecimiento de comidas relevante y salir del negocio.
Examine la posición y las descripciones de los elementos en el menú. La posición de un artículo puede influir en su popularidad. Por ejemplo, el ojo tiende a gravitar primero hacia el lado superior izquierdo de la página, por lo que los elementos en esta posición serán más populares.
Compare los precios con los elementos del menú para ver si corresponden. ¿Los precios se cobran de acuerdo con los alimentos que se venden, o los clientes están sobrecargados o cargados por los artículos?
Utilice la técnica de matriz de Boston, también conocida como "análisis de cartera" o "análisis de menú". La matriz de Boston es una forma de analizar los precios de un menú y la información de ventas para mejorar el rendimiento del restaurante. Este método puede ayudarlo a determinar qué elementos del menú le están haciendo dinero y le permitirán crecer en su establecimiento.
Examinar la ubicación de los precios. Los restaurantes prefieren colocar el precio después de la descripción del artículo y declararlo sin el signo de dólar. Esto lleva al cliente a centrarse en el artículo y no a elegir lo que quiere según el precio, lo que probablemente sucederá si los precios están alineados.
Mira el diseño del menú. Vea lo atractivo que es y lo fácil que es leer. Determine si las opciones son claras, por ejemplo, si los platos de acompañamiento están incluidos o no en el precio de una comida.