Cómo auditar un proceso de fabricación

Anonim

Una auditoría de un proceso de fabricación es un examen completo del proceso para verificar que se está desempeñando según lo previsto. Los procesos generan resultados y las auditorías de procesos determinan si los resultados son precisos y se generan mediante un proceso administrado de manera efectiva. Las auditorías de los procesos de fabricación deben garantizar que los procedimientos se sigan correctamente, que los problemas se corrijan rápidamente, que haya coherencia en el proceso y que haya mejoras continuas y acciones correctivas según sea necesario.

Seleccione un proceso para ser auditado. Priorice los procesos que pueden auditarse en términos de importancia y riesgo para la operación en general. Comience por auditar las áreas de mayor riesgo primero.

Seleccione un equipo para realizar la auditoría. El equipo de auditoría debe estar familiarizado con el proceso que se audita. También deben estar familiarizados con las técnicas de auditoría, como el muestreo y el análisis de resultados. Deben tener la experiencia necesaria para identificar problemas y determinar las acciones correctivas necesarias.

Decida con qué frecuencia se debe observar el proceso (la frecuencia de la auditoría). Si hay problemas significativos o falta de cumplimiento, el proceso debe observarse más a menudo hasta que la situación esté bajo control.

Anuncie la auditoría con antelación para que no haya sorpresas. El objetivo es mejorar el proceso, lo que requerirá la cooperación de todos los involucrados.

Configure un calendario de auditoría para todo el turno y siga el calendario de auditoría establecido. El número de observaciones será su muestra del trabajo para ese cambio. El calendario de auditoría debe determinarse por adelantado y debe ser lo más aleatorio posible. Una vez establecido, se debe seguir el cronograma de auditoría para proporcionar resultados basados ​​en una muestra aleatoria.

Documentar cualquier problema descubierto e informar a todos los afectados. La idea no es culpar, sino encontrar una solución. Los problemas descubiertos se convierten en la base para acciones correctivas y seguimiento. Todas las personas afectadas por el problema deben ser informadas para que estén al tanto y puedan aportar información para la resolución. Además, el proceso que se audita probablemente afectará a otros procesos en la operación general.

Determinar y realizar acciones correctivas. Permita que los empleados hagan sugerencias para acciones correctivas y seleccione las que sean apropiadas, pero la gerencia debe tomar la decisión final sobre qué acciones correctivas implementar.

Monitorear resultados de acciones correctivas. Realice un seguimiento de seguimiento para determinar si las acciones correctivas realmente han eliminado el problema o si se requieren acciones adicionales. También verifique que no se hayan desarrollado o ingresado nuevos problemas en el proceso.