Los controles internos son los estándares y las reglas utilizadas por las empresas para garantizar que alcancen los objetivos establecidos en el mercado. La rentabilidad no solo se logra a través de las altas ventas y la satisfacción de la demanda de los consumidores, sino también del control de los costos y la limitación del gasto excesivo. La gerencia debe revisar periódicamente todos los aspectos de su compañía e insertar controles internos que fortalezcan a la compañía y aumenten la rentabilidad.
Entorno operativo
Los controles internos ayudan a promover operaciones diarias sólidas que producen bienes y servicios de alta calidad al menor costo posible. La limitación del inventario excesivo, los altos costos de equipo y los servicios públicos excesivos aseguran que los costos operativos se mantengan dentro de un presupuesto razonable. Los gerentes se aseguran de que a medida que se producen los bienes y servicios, las máquinas u otros equipos se utilicen adecuadamente para evitar cualquier mal funcionamiento. El uso incorrecto de los activos de la empresa puede generar un tiempo de inactividad si los bienes tienen que volver a producirse debido a defectos en el producto.
Evaluación de riesgos
La evaluación de riesgos es un control interno importante. Cada decisión comercial viene con un cierto riesgo; Evitar o mitigar este riesgo se logra a través de fuertes controles internos. Los controles que mitigan el riesgo podrían incluir limitar los niveles de deuda utilizados para financiar operaciones o adquisiciones, asegurar la reinversión de efectivo en el negocio o pautas para evitar valores de riesgo al generar efectivo a partir de actividades de inversión. Estos tipos de controles internos impiden que la administración ejecutiva tome decisiones potencialmente peligrosas que podrían tener efectos a largo plazo en una empresa.
Compañía de Policías
Las empresas utilizan políticas para garantizar un entorno empresarial seguro y rentable. Estas políticas son controles internos que ayudan a la administración en áreas que incluyen recursos humanos, conciencia de la comunidad y relaciones de empresa a empresa. Las empresas informan a los empleados de estos controles internos para garantizar que la reputación de la empresa no se vea empañada como resultado de los empleados con una educación inadecuada. Las compañías públicas tienen fuertes políticas de control interno para garantizar que los inversores no se vean influenciados indebidamente por comunicaciones informales fuera de los estándares normales de la compañía.
Información financiera
Los controles internos más importantes suelen presidir la información financiera de una empresa. El reporte incorrecto de información financiera se considera fraude y causará problemas rápidamente. Las empresas generalmente desarrollan controles internos para la información financiera y luego los prueban periódicamente para garantizar que sean las salvaguardas adecuadas. Las empresas públicas deben tener auditores externos que prueben sus controles internos como parte de las regulaciones federales Sarbanes-Oxley aprobadas en 2002.
Mediciones de rendimiento
Muchas compañías vinculan los controles internos a las evaluaciones de desempeño para gerentes de nivel medio y otros empleados. Este estilo de evaluación del desempeño permite a las empresas la oportunidad de educar y revisar los controles internos con los empleados de forma regular. Esto les enseña a los empleados el valor de alcanzar los objetivos siguiendo la política de la compañía, asegurando una mayor rentabilidad para la empresa.