La formación de capital se refiere al dinero que se mueve de actividades económicamente no productivas y se pone a disposición de las empresas. Por ejemplo, la formación de capital ocurre cuando los individuos reservan parte de sus ganancias para ahorros e inversiones. Las ganancias comerciales reinvertidas y la financiación de proyectos empresariales a través del gobierno u otras organizaciones también pueden agregarse a la formación de capital.
Formación de capital y crecimiento económico
Para que la economía de una sociedad crezca a largo plazo, es esencial aumentar la capacidad para producir bienes y servicios. La acumulación de capital proporciona el dinero que las empresas necesitan para expandir sus actividades y, por lo tanto, contribuir al crecimiento económico general. Por ejemplo, la acumulación de capital hace que haya fondos disponibles que una empresa puede usar para construir nuevas instalaciones de fabricación. Un suministro rápido de capital también hace posible que las empresas inviertan en nuevas tecnologías y equipos para aumentar la productividad de los trabajadores. El Banco de la Reserva Federal de Kansas City cita el ejemplo histórico del cambio de documentos escritos a mano a máquina. La introducción de máquinas de escribir aumentó la productividad de los trabajadores de oficina y, por ende, la producción económica general.