El primer satélite artificial del mundo, Sputnik, fue lanzado en 1957 por Rusia. Esto proporcionó a los países de todo el mundo el impulso para comenzar a lanzar sus propios satélites. Los Estados Unidos lanzaron su primer satélite en 1958 llamado Explorer I, conocido oficialmente como Alpha. La vigilancia satelital es una capacidad tecnológica asociada principalmente con los militares y organizaciones como la CIA y el FBI. Sin embargo, con los avances en tecnología, varias compañías de telecomunicaciones, corporaciones de medios y gobiernos también han lanzado satélites.
Las fuerzas del orden
Los organismos encargados de hacer cumplir la ley se han beneficiado del uso de satélites en acciones de aplicación de la ley y con fines logísticos. Con la vigilancia satelital, estas agencias pueden realizar un seguimiento de los movimientos de presuntos delincuentes en el suelo, identificar los autos que han sido denunciados como robados y posiblemente leer las matrículas. La policía utiliza imágenes satelitales para rastrear a las personas buscadas por varios delitos, espiarlas dentro de sus escondites y planear incursiones que mantienen las bajas al mínimo.
Planificación de la guerra y lucha contra el terrorismo
La vigilancia satelital a través de imágenes satelitales ha permitido a Estados Unidos penetrar en la capa de nubes, detectar rastros químicos, identificar objetos y la cantidad de humanos en un edificio por calor corporal, detectar bunkers subterráneos e identificar áreas de almacenamiento de armas. El video en tiempo real y las imágenes de alta resolución han ayudado al ejército, la marina y la fuerza aérea a planear ataques en tiempos de guerra. Las fuerzas armadas estadounidenses ya no se quedan ciegas para pelear una batalla. Con la ayuda de la vigilancia satelital, se pueden hacer planes muy detallados para los ataques ocultos con éxito, como se demostró en la redada de 2011 en la vivienda de Osama bin Laden.
Violación de los derechos de privacidad individual
Varios grupos de derechos civiles y grupos de privacidad se han opuesto a la vigilancia por satélite y otros tipos de vigilancia como una violación del derecho de la persona a la privacidad. Al considerar que la vigilancia satelital es una infracción a la libertad personal, diversos grupos e individuos han presentado demandas contra el Departamento de Justicia y las grandes corporaciones para oponerse a las actividades de vigilancia y monitoreo. Es difícil estimar el número de personas bajo vigilancia, porque algunos de los países tecnológicamente avanzados tienen la capacidad de realizar una vigilancia multitarget.
Riesgo de abuso
Al principio, la tecnología de vigilancia satelital estaba controlada por unas pocas agencias gubernamentales. Sin embargo, a medida que la tecnología avanzaba y más corporaciones privadas comenzaron a usarla, el riesgo de abuso de la tecnología aumentó considerablemente. Hay muchas empresas privadas en Estados Unidos que participan en el negocio de satélites, como Lockheed, Westinghouse, Comsat, Boeing, Hughes Aircraft, Rockwell International y General Electric. Algunos de los riesgos de abuso de la tecnología de vigilancia satelital incluyen el espionaje industrial, el espionaje ilegal de empresas rivales y países y el robo de información clasificada.