Un informe comercial sirve a un propósito principal: ayudar a una empresa a resolver un problema. La introducción al informe sienta las bases para entender el problema y cómo puede resolverse. También ayuda a los lectores a comprender cómo se presenta y organiza el informe.
Identificar el problema a resolver. Podría ser cualquier cosa, desde abordar una emergencia dentro de la empresa hasta encontrar formas de aumentar las ganancias. Explica la situación actual en detalle.
Transmitir a su audiencia por qué el problema es importante. Si es un problema que debe resolverse de inmediato, es probable que el informe reciba más atención que si no es uno de los más altos en la lista de prioridades de la empresa. Explique algunas formas clave en las que la compañía se está viendo afectada actualmente y lo que podría suceder en el futuro si el problema no se resuelve.
Proporcionar información de fondo sobre el problema. Identifique lo que llevó a la situación actual y cualquier otra información histórica que ayude a explicar el problema. Incluye información desde tantos ángulos como sea posible.
Indique el alcance y la naturaleza del informe. El informe se puede escribir después de una investigación amplia del problema o puede ser de naturaleza más restringida y describir los pasos potenciales para resolver el problema. Esto ayudará a sus lectores a saber qué tan profundo será el informe.