Existen docenas de teorías de liderazgo, y casi todas tienen una relación cercana con la gestión empresarial. En general, hay cinco que se citan con regularidad: transaccional, transformacional, basada en rasgos, teoría situacional y cognitiva.
Transaccional
El sociólogo Max Weber desarrolló la distinción entre liderazgo transaccional y transformacional. Este es un enfoque bastante simple para el liderazgo. Estos son básicamente líderes burocráticos que dan órdenes y esperan que otros los sigan. No es tanto el liderazgo, sino la habilidad para trabajar los recursos de una burocracia, como un partido político, una oficina corporativa o un grupo de opinión, lo que le otorga autoridad a este tipo de líder (ref. 1).
Transformacional
Esto es lo opuesto al liderazgo transaccional. Este tipo de líder es carismático y busca superar el interés propio y la coerción para motivar a las personas. Es un liderazgo basado en la devoción, en lugar de una estructura burocrática de interés propio. Este tipo de líder cambia las mentes. Su autoridad de mando se basa en su simpatía y capacidad para articular una visión. (ref 1)
Teoría de los rasgos
D. Goldman es uno de los principales escritores en teorías de liderazgo basadas en rasgos. Este tipo de liderazgo se basa en ciertos ingredientes que los buenos líderes deben tener. Los líderes derivan su autoridad de la experiencia. Los rasgos básicos incluyen autoconciencia, habilidades sociales, autocontrol, motivación y empatía. Estas juntas crean un líder que las personas están dispuestas a seguir, independientemente de su motivación para hacerlo. (ref 1)
Situacional
P. Hersey y K. Blanchard desarrollaron un tipo de liderazgo cuádruple. Básicamente, las cuatro divisiones van desde los mandatos más duros hasta la mera observación, dependiendo de la motivación de los líderes. Es un espectro de coerción, desde la mayor coerción (dirigir) hasta la menor (observar). Los dos primeros son la dirección y el coaching. Dirigir se refiere a un comando directo, mientras que el entrenamiento es un "comando expresado", envuelto en un lenguaje motivacional. Está ordenando al mismo tiempo que alienta. Los dos últimos que requieren la menor cantidad de coerción son el apoyo y la observación. El apoyo es algo menos que entrenamiento, es una cuestión de darle al empleado un pequeño impulso para completar la tarea, mientras que la observación implica supervisar a un empleado que ya está motivado y trabajando (ref. 2).
Cognitivo
F.E. Fiedler y J.E. Garcia desarrollaron una forma de teoría de rasgos llamada teoría de recursos cognitivos. Destaca el rasgo de inteligencia general probado por la experiencia. Según esta teoría, los líderes que son altamente inteligentes se dirigen directamente a través del mando. Funcionan bien bajo estrés, y las decisiones tomadas en condiciones estresantes proporcionan una base de experiencia. Los directores inteligentes normalmente solo funcionan bien cuando se trata de complejidad. Solo hacen hincapié en un rasgo, el del poder del cerebro, y demuestran que este rasgo es muy limitado. (ref. 3).