La mayoría de las empresas incorporan presupuestos en efectivo en su proceso general de presupuestación. Los presupuestos de efectivo revisan los recibos de efectivo anticipados y el desembolso de efectivo para el período del presupuesto. Los gerentes usan esta información para determinar si la compañía necesita financiamiento adicional para el período del presupuesto. Como todos los procesos, los presupuestos en efectivo tienen varias desventajas.
Uso de las estimaciones
El proceso de presupuestación se basa en estimaciones de eventos futuros. Los gerentes intentan anticipar las actividades futuras de la empresa. El presupuesto en efectivo se basa en estimaciones de ventas futuras y cobros futuros recibidos en esas ventas. El presupuesto en efectivo también se basa en estimaciones de gastos futuros en los que la compañía espera incurrir. Los gerentes basan las estimaciones en su instinto más que en hechos. Las estimaciones limitan la efectividad del presupuesto en efectivo porque no se dispone de información objetiva.
Falta de flexibilidad
El proceso de presupuesto implica crear números para ingresar en el presupuesto, publicar los números de presupuesto y distribuir esos informes a la gerencia. Una vez publicados, estos números no cambian. Los presupuestos en efectivo incluyen información sobre las necesidades financieras esperadas de la empresa. Una vez que la administración revisa el presupuesto en efectivo, toma decisiones basadas en las necesidades de financiamiento esperadas. Si las necesidades de financiamiento reales son menores que el presupuesto, la administración ya se ha comprometido con el financiamiento para el período del presupuesto. Si las necesidades de financiamiento reales son más que el presupuesto, la administración no se ha comprometido a un financiamiento suficiente e incurrirá en un déficit de efectivo. La gerencia deberá pedir dinero prestado a tasas de interés más altas que las planificadas para satisfacer sus necesidades de efectivo.
Manipulación
Los gerentes con motivos ocultos manipulan los números del presupuesto para que se reflejen bien en sí mismos. Un gerente que toma decisiones que afectan el presupuesto en efectivo puede subestimar sus gastos para el período del presupuesto. Esto reporta desembolsos en efectivo presupuestados que son demasiado bajos. El gerente recibe elogios por su trabajo en el presupuesto. Sin embargo, cuando los gastos reales ocurren y no cumplen con los números del presupuesto, los desembolsos de efectivo incurrirán en una variación. Para entonces, el gerente puede estar en una posición diferente y no sentir las repercusiones de sus acciones.
Falta de factores no financieros
Cuando se utiliza un presupuesto en efectivo para analizar las necesidades de financiamiento y las opciones de financiamiento, se omiten los factores no financieros. El propietario de un negocio puede optar por pedir prestado fondos de uno de dos bancos. Un banco puede ofrecer una tasa de interés más baja, que se puede cuantificar e informar sobre el presupuesto en efectivo. El otro banco puede ofrecer un mejor servicio al cliente y ofrecer beneficios no financieros para pedir prestado de ellos. Los factores no financieros no se reflejan en el presupuesto en efectivo.