Los Estados Unidos ganan la mayor parte de sus impuestos de los ingresos o impuestos a las ventas. Sin embargo, en muchos otros países, el impuesto al valor agregado, o IVA, se utiliza para la recaudación de impuestos en cada fase del desarrollo del producto hasta la venta final. Para hacer esto, los certificados de IVA proporcionan un método de licencia, que ayuda a recaudar impuestos en las empresas registradas.
Certificados
Los certificados de IVA son distribuidos por las oficinas del gobierno local en los países donde se aplica el IVA. Esta forma de licencia le permite a una empresa conforme a las reglas del IVA presentar impuestos, obtener reembolsos de impuestos y mover el producto dentro y fuera del país.
Información del Gobierno
Los certificados de IVA proporcionan a los gobiernos datos de registro, que luego se pueden usar para calcular el número de empresas que se espera que paguen impuestos de IVA. A partir de esta información, los ingresos futuros del gobierno pueden proyectarse por ciclo fiscal. Además, los certificados también brindan una capacidad de referencia cruzada de cumplimiento, asegurando que las empresas sean rastreadas y los infractores queden atrapados en el acto cuando son inspeccionados y no exista registro.
Sanciones sin un certificado
No tener un certificado de IVA representa una mala noticia para un negocio infractor. Las sanciones típicas incluyen niveles variables de multas. Sin embargo, algunas jurisdicciones imponen prisión, dependiendo de la severidad de la violación. Las infracciones típicas incluyen no registrarse en absoluto para obtener un certificado, no mostrar la licencia, no enviar cambios de identidad comercial o no cooperar con las reglas de cancelación.