Los gerentes deben ocasionalmente lidiar con la mala conducta de los empleados. Las infracciones pueden ser leves o pueden involucrar actos graves e incluso ilegales. La suspensión y la terminación son opciones disciplinarias que los empleadores pueden usar. La suspensión es una separación temporal del trabajo, mientras que la terminación o el despido significa despido permanente.
Políticas del empleador: Suspensión y terminación
Los empleadores frecuentemente suspenden a un empleado en lugar de despedirlo por un par de razones. Primero, algunas faltas de conducta son leves, como llevar algunos suministros de oficina o no realizar una tarea. Típicamente, tales suspensiones están precedidas por una reprimenda oral o escrita. Segundo, un trabajador puede ser suspendido en espera de una investigación por mala conducta. En cualquier caso, una suspensión no necesariamente significa que el empleado será despedido. Por lo general, la terminación se lleva a cabo como último recurso y se usa si el comportamiento inaceptable no se corrige o si una investigación demuestra que la conducta indebida es lo suficientemente grave como para justificar el despido.
Causas de la acción disciplinaria
HG.org dice que las políticas de la compañía con respecto a la suspensión y finalización deben explicarse claramente en los acuerdos de empleo y en un formato escrito, como un manual del empleado. Por lo general, los empleadores consideran el despido cuando un empleado viola una ley a sabiendas al participar en una conducta violenta, acoso sexual u otra actividad criminal. La violación de un contrato de trabajo y las violaciones repetidas de la política de la compañía también son motivo de suspensión o terminación. La divulgación intencional de información confidencial o daños al empleador o sus activos serían razones para la suspensión y tal vez la terminación, al igual que la negativa o la falla para realizar el trabajo asignado.