ISO, la Organización Internacional para la Estandarización, mantiene pautas estrictas para el control de documentos relacionados con las operaciones comerciales. Cualquier empresa que intente certificaciones ISO debe demostrar un método verificable para usar, actualizar y almacenar documentos relacionados con el control de configuración de la empresa.
Documentos controlados
Cualquier documento utilizado en la aplicación de cualquier norma ISO debe controlarse mediante un sistema de gestión de la calidad (SGC) específico de la empresa. ISO define un documento controlado como uno que cumple con estos criterios, independientemente del estándar aplicado.
Gestión de la calidad
Un documento controlado puede almacenarse electrónicamente, en un disco, en papel o como una fotografía. El QMS garantiza la integridad de cada documento mediante el cumplimiento de reglas específicas para el uso y almacenamiento de documentos. El alcance del sistema de gestión de la calidad de cada empresa variará según el tamaño de la empresa, la competencia del personal y la complejidad del negocio.
Estructura
Normalmente, una norma ISO tendrá cuatro niveles de estructura documental: política, procedimiento, instrucción de trabajo y formularios y registros. Cada nivel está diseñado para un área específica y se aplica en todos los niveles de la organización. Cada tipo de documento se puede aplicar en prácticamente cualquier negocio.
