Mantener un plan de desempeño y desarrollo de los empleados beneficia tanto a la compañía como a los empleados al definir metas alcanzables para que los empleados puedan cumplir a medida que ascienden en la carrera profesional. A medida que los empleados completan los pasos de desempeño y avanzan, se alcanzan los objetivos de la empresa. Un plan útil incluye aportaciones tanto de miembros de la gerencia como de subordinados.
Determinar los objetivos de rendimiento
El rendimiento de los empleados y los planes de desarrollo suelen incluir objetivos de rendimiento. Este aspecto del plan define estrechamente hacia dónde se dirige el puesto de trabajo y cuál debe ser el objetivo final para llegar allí. Por ejemplo, un objetivo de desempeño de un asistente de gerente puede ser lograr habilidades en mercadotecnia para que, una vez que el trabajador se convierta en gerente, sepa cómo promover el negocio.
Definir deberes medibles
Los planes de desempeño y desarrollo de los empleados deben incluir tareas medibles para cada puesto. Al usar el puesto de gerente asistente, un deber medible para aprender marketing podría ser tomar una clase de mercadeo y proporcionar una prueba de que la clase fue aprobada. Los deberes medibles con respecto al desempeño y desarrollo de los empleados deben dividir la meta más grande en deberes más pequeños que deben completarse dentro de un marco de tiempo específico.
El plan
Los planes de desempeño y desarrollo de los empleados deben diseñarse durante un esfuerzo de equipo que incluya al empleador y los empleados. El aporte de los empleados es importante para que tengan un sentido de propiedad al seguir los pasos y deberes del plan. El aporte del empleador es importante porque enfoca el desarrollo y el desempeño en el objetivo final de lograr los objetivos de la empresa.
Detalles específicos
Cada plan debe incluir criterios específicos que deben cumplir los empleados para pasar al siguiente nivel en su carrera. El empleado y el gerente deben reunirse a intervalos regulares para revisar el plan de desempeño y registrar los pasos y deberes específicos que se han completado. El empleado y los miembros de la gerencia pueden completar una evaluación anual o bianual para verificar el progreso y redefinir los pasos a corto y largo plazo que se deben tomar para alcanzar los objetivos.