Rellenar el presupuesto es una práctica que algunas personas utilizan en los negocios al presentar un presupuesto para su aprobación. Infla artificialmente el presupuesto propuesto para que el espacio del proyecto se expanda o cubra costos inesperados. Muchos consideran que el presupuesto no es ético, pero sus practicantes lo defienden por razones prácticas.
Definición
Rellenar el presupuesto significa hacer que la propuesta de presupuesto sea más grande que las estimaciones reales para el proyecto. Esto se hace ya sea aumentando los gastos de un proyecto o disminuyendo sus ingresos esperados. El objetivo del presupuesto es obtener un comité de aprobación para otorgar un nivel de financiamiento artificialmente alto para el proyecto propuesto por el creador del presupuesto. Existe cierta controversia sobre la definición exacta de relleno: algunos sostienen que inflar los gastos para tener en cuenta la inflación esperada es una previsión responsable en lugar de un relleno, mientras que otros consideran que cualquier aumento más allá de las estimaciones actuales es un relleno.
Incentivos
Los creadores de presupuesto enfrentan varios incentivos para cubrir sus presupuestos. Primero, quieren tener en cuenta los factores económicos. Esto se aplica a los aumentos de presupuesto que anticipan la inflación o, en el caso de proyectos internacionales, las fluctuaciones en los tipos de cambio. En segundo lugar, quieren evitar la burocracia. Si surge un gasto inesperado, el acolchado otorga al proyecto la flexibilidad para cubrirlo, lo que se denomina espacio de relajación o respiración. En tercer lugar, quieren causar una impresión favorable en sus superiores. Si proponen un presupuesto mayor y luego superan el presupuesto, los jefes verán favorablemente al equipo del proyecto. Por último, temen recortes presupuestarios. Algunos que luchan contra el presupuesto luchan contra los recortes que consideran injustos anticipándolos con una propuesta inflada.
Consecuencias
En teoría, los proyectos deben gastarse de acuerdo con las estimaciones presupuestarias precisas para que el relleno no tenga un efecto real. En la práctica, sin embargo, el relleno presupuestario tiene consecuencias concretas. Los proyectos con espacio extra en su presupuesto tienden a utilizarlo. Los proyectos recurrentes, especialmente, gastan dinero innecesariamente para agotar todos sus presupuestos. De esa manera, el comité de aprobación no recortará sus presupuestos en el año siguiente.
Consideraciones éticas
Aparte de las consecuencias financieras, muchas personas cuestionan la aceptabilidad del margen presupuestario porque es una práctica engañosa. Dicen que engendra un ambiente corporativo nocivo. Los defensores de los gastos de presupuesto citan su uso generalizado como una justificación de su aceptabilidad. También argumentan que las acciones injustas por parte de los patrones, como los recortes presupuestarios, los obligan a una inflación presupuestaria preventiva.