Un empleado que hace una cantidad excesiva de preguntas le quita el tiempo y puede agotar su paciencia. Los nuevos empleados a menudo tienen una gran cantidad de preguntas. Si un empleado continúa haciendo preguntas sobre todo lo que hace, puede mostrar un signo de inseguridad o perfeccionismo. Aprender a tratar con los empleados necesitados requiere práctica y paciencia, pero el proceso ayuda a los empleados a ganar más confianza. También podrá reclamar su tiempo de trabajo cuando logre que el empleado adquiera el hábito de resolver sus propios problemas.
Reúnase con el empleado para discutir los obstáculos que enfrenta en su trabajo. Determine si necesita capacitación adicional, más autoridad o mejor acceso a los recursos para realizar su trabajo sin tantas preguntas.
Proporcione una lista de recursos, ya sea en línea o en forma impresa, que el empleado pueda acceder para ayudarlo a responder preguntas por sí mismo. Hágale saber que confía en él para investigar las respuestas a las preguntas.
Presione al empleado para resolver problemas de forma independiente en lugar de confiar en usted todo el tiempo. En lugar de resolver el problema o encargarse del trabajo por cuenta propia, ofrezca sugerencias a los empleados para solucionar la situación o encuentre las respuestas necesarias.
Permítale al empleado un tiempo limitado para reunirse con usted para responder preguntas. Esto obliga al empleado a enfocar las preguntas mientras reduce la cantidad de tiempo que dedica a la situación.
Asigne un mentor al empleado que sea capaz de proporcionar capacitación y conocimientos prácticos. Reúnase con el mentor para proponer ideas de capacitación o formas de manejar el cuestionamiento excesivo.
Elogie a la empleada cuando note que toma la iniciativa para encontrar sus propias respuestas y completar sus tareas laborales. Encuentre oportunidades para darle una retroalimentación positiva y honesta para alentarla a continuar trabajando independientemente.