Preparar a un empleado para convertirse en supervisor es fundamental para el éxito futuro de una empresa. La capacitación de los supervisores debe ser memorable para que sea efectiva, y debe proporcionar a la futura administración de la empresa las herramientas necesarias para garantizar que la empresa se mantenga en el curso de la prosperidad.
Gestionar la diversidad y el estrés
La fuerza laboral de hoy es muy diferente a la fuerza laboral de hace una generación. Hoy en día, un supervisor se enfrenta a una población de empleados formada por diversas culturas, religiones y habilidades.Con el mayor énfasis puesto en los derechos legales de los empleados en el lugar de trabajo, un supervisor debe encontrar ese equilibrio entre tener en mente los intereses de la empresa y respetar las necesidades de los empleados. Es importante que un nuevo supervisor comprenda la diversidad que se encuentra en el lugar de trabajo y estudie las diversas formas en que los empleados se muestran y reciben respeto. Para obtener la mayor productividad posible de un grupo de empleados, es necesario hacerles saber que sus necesidades individuales son tan importantes como las necesidades del grupo. Para lograr esto, un supervisor necesita aprender cómo responder a las diferentes culturas en el lugar de trabajo, y también comprender cómo crear una atmósfera de trabajo en equipo. Gran parte de la capacitación en torno a estas situaciones implica capacitación en sensibilidad cultural que ayudará a un nuevo supervisor a comprender cómo dirigirse a una fuerza laboral multicultural y hacer que trabajen juntos.
El estrés forma parte del lugar de trabajo todos los días y una de las mejores maneras de aprender para ayudar a otros a manejar el estrés es aprender a lidiar con el estrés. Un nuevo supervisor necesita aprender a detenerse y analizar una situación antes de reaccionar. Estos se conocen comúnmente como "ejercicios instintivos", donde se enseña a un supervisor a moderar su reacción inicial ante una situación al tomarse el tiempo de escuchar primero todos los hechos. Es un ejercicio de paciencia que ayudará a un nuevo supervisor a comprender el beneficio de respirar profundamente antes de decidir actuar en una situación.
Trabajo en equipo
Una de las tareas más importantes que enfrenta un supervisor es facilitar el trabajo en equipo entre los diferentes miembros del equipo. Uno de los ingredientes clave para establecer un supervisor como punto focal de un grupo es la confianza del grupo en la capacidad de liderazgo del supervisor. Un ejercicio muy efectivo para un nuevo supervisor en la formación de equipos es un ejercicio en el que el supervisor se toma el tiempo de evaluar a cada miembro del grupo y luego comprende las fortalezas y debilidades de cada miembro. Un supervisor que sea capaz de asignar tareas a los miembros del grupo de manera efectiva basándose en las fortalezas de esos miembros mostrará una capacidad para delegar responsabilidades que tienen sentido para el grupo. Esta es una manera muy efectiva de desarrollar el trabajo en equipo y también ayuda al nuevo supervisor a ganarse el respeto de los miembros del equipo.
