La planificación de la continuidad comercial prepara a una empresa para reaccionar ante condiciones peligrosas o adversas. Las empresas pueden desarrollar planes que cubran desastres naturales como terremotos, desastres provocados por el hombre, como incendios, o problemas generales de infraestructura, como cortes de energía. Los planes detallan los pasos que tomarán la empresa y sus empleados en varios escenarios de desastre. Al prepararse de antemano para la mayor cantidad de contingencias posibles, las empresas buscan cumplir los objetivos de un plan de continuidad comercial de manera eficiente y efectiva.
Reducir las interrupciones
Los planes de continuidad comercial apuntan a reducir o eliminar las interrupciones en las operaciones comerciales normales. Las estrategias para minimizar las interrupciones incluyen la capacitación del personal en tareas específicas que cada persona emprenderá en un escenario determinado. Algunos planes pueden especificar formas alternativas de mantenerse en contacto para situaciones donde las comunicaciones normales por teléfono o correo electrónico ya no funcionan. Los planes también buscan proteger a los proveedores, socios y clientes de las interrupciones. Si una empresa produce componentes de la cadena de suministro de otra empresa, el plan puede incluir métodos para acelerar la producción y la entrega de los artículos necesarios.
Proteger la cuota de mercado
Un plan de continuidad comercial incluirá los pasos que la empresa puede tomar para prevenir o eliminar los daños a la reputación de la empresa. Cumplir con las obligaciones establecidas a pesar de las calamidades ayuda a presentar un negocio bajo una luz favorable. Si una empresa tiene algunos clientes cuyo valor para la empresa es particularmente alto, el plan puede establecer un medio para proteger ese conjunto particular de clientes. El objetivo en cada caso es proteger la participación de la empresa en el mercado y, a su vez, evitar pérdidas financieras.
Garantizar la seguridad
Debido a que algunas interrupciones del negocio pueden ser provocadas por el hombre, como los ataques terroristas, un plan de continuidad del negocio puede centrarse en mantener seguros a los empleados, el negocio y las finanzas del negocio. Los planes pueden abordar no solo la seguridad física sino también la viabilidad financiera. Las regulaciones gubernamentales pueden exigir que las empresas incluyan medidas específicas en un plan que proteja el mercado de capitales de la nación, especialmente para las empresas del sector financiero, como los bancos. Las regulaciones permiten a las empresas ayudar a minimizar los posibles efectos adversos de una interrupción a gran escala en los mercados de infraestructura financiera de los Estados Unidos. Al mismo tiempo, las medidas promueven la seguridad de las finanzas individuales de la empresa.