Un embudo de ventas, también conocido como un embudo de ventas y marketing, es una ilustración gráfica de los pasos que los consumidores toman al considerar una compra. La teoría del embudo de ventas es que los representantes de ventas deben diseñar sus esfuerzos en torno a los pasos específicos que un cliente toma en su proceso de toma de decisiones.
Piezas de embudo
Los embudos tradicionales tienen al menos cuatro partes clave: conciencia, familiaridad, consideración y compra. Muchas compañías agregan un elemento de postventa (lealtad) al embudo para asegurar la repetición de negocios o generar referencias de clientes satisfechos.
Actividades de la parte
Los consumidores primero se dan cuenta de que existe un producto o servicio, tal vez de un anuncio o de ventas llamadas frías. Luego, el vendedor trabaja para familiarizarse con el producto y, idealmente, presenta suficiente información convincente para que compre el producto. Luego, el negocio continúa con un servicio al cliente o un programa de lealtad.
Cambios de embudo
Algunos analistas y expertos creen que el embudo de ventas se está transformando o incluso se está volviendo obsoleto. Se ha vuelto más fácil para los consumidores realizar su propia investigación en Internet sin tener contacto con ningún vendedor. En consecuencia, muchos consumidores deliberan durante más tiempo, ya que consideran una amplia gama de opciones de productos.