Todas las empresas están obligadas por ley federal a designar a sus empleados como exentos o no exentos de acuerdo con la Ley de normas laborales justas. También conocida como FLSA, la ley se promulgó originalmente en 1938 para proteger los derechos de los trabajadores, establecer el salario mínimo y regular el pago de horas extra. Enmendada de vez en cuando para reflejar las leyes comerciales vigentes, la FLSA cubre a los empleados de tiempo completo y parcial por hora y establece criterios para los trabajadores asalariados.
Empleados no exentos
Los empleados no exentos se denominan así porque no están exentos de las leyes de la FLSA. A los empleados no exentos se les paga por hora y disfrutan del pago de horas extra por las horas trabajadas más de 40 horas por semana, como mínimo una vez y media su pago por hora normal. Algunos estados y compañías pueden tener variaciones permitidas por la FLSA, como el aumento del salario mínimo, la disminución de las designaciones de horario laboral de tiempo completo y políticas de tiempo extra más generosas, pero al menos deben cumplir con los mínimos establecidos por la ley.
Empleados exentos
Los empleados exentos son aquellos que están exentos de las leyes de horas extraordinarias de FLSA, pero deben cumplir con los criterios de clasificación de la FLSA: los empleados exentos deben recibir un salario de al menos $ 23,600 por año, trabajar en los tipos de trabajo definidos por FLSA y generalmente no reciben horas extra. Estos puestos de trabajo suelen ser puestos de ventas, administración, administración, supervisión, ejecutivos y otros puestos definidos por la FLSA. La decisión de clasificar a cualquier empleado como exento depende en gran medida de la empresa contratante siempre que se sigan las pautas de la FLSA.
Beneficios del empleo no exento
Los beneficios del empleo no exento varían según el trabajo y la industria, especialmente donde abundan las horas extra para los empleados de tiempo completo. En la manufactura, servicios y otras industrias donde las horas extras regulares, estacionales o periódicas son la norma, los empleados pueden aumentar sustancialmente sus cheques de pago. Los empleados no exentos también se benefician al tener a la FLSA de su lado en caso de que su empleador no esté cumpliendo, o pagando, las reglas.
Desventajas del empleo no exento
Las horas extraordinarias regulares o periódicas para cualquier empleado no exento no están garantizadas ni obligadas por la FLSA o cualquier otra ley, excepto quizás en algunos casos relacionados con contratos sindicales. En tiempos de desaceleración de la empresa, los trabajadores que están acostumbrados a pagar horas extraordinarias a veces pueden experimentar dificultades financieras.